El pasado miércoles hicimos un taller de escritura. Hacía mucho tiempo que no ponía en práctica para otros, y menos para mí misma, una dinámica de este tipo. Creatividad e imaginación son las palabras que mejor expresan lo que hicimos esa mañana. Un taller de este tipo, tiene como principal función la posibilidad y la capacidad de CREAR.
Es una buena herramienta el uso de las palabras, y en consecuencia, de la escritura para conseguir que los niños conozcan sus más recónditas capacidades, que puede que muchos, tal como está de asentada actualmente la tecnología, aún no hayan podido descubrir. Conocer y trabajar la escritura, las palabras es a mi modo de ver un buen comienzo para despertar en la persona el interés por la lectura. Al igual que crear, imaginar, leer, escribir es entretenimiento; pero no entretenimiento donde el tiempo parece que pasa de forma poco provechosa, es entretenimiento que contiene muchas ventajas saludables: el trabajo de la concentración, la creatividad, el fomento de la lectura, la cooperación, etc.